En busca del Swing Perfecto

El swing de golf es un movimiento complicado que aúna velocidad y precisión. No es una acción sencilla, ya que es un movimiento antinatural para nuestro cuerpo, pero una vez aprendidos unos pasos básicos, a la larga se volverá parte de tu memoria muscular y te saldrá sin ni siquiera pensar en lo que estás haciendo.

PRIMER PASO: Sujetar el palo
La forma en que sujetas el palo y te paras junto al tee se determina por tu mano dominante. Si eres diestro, te pararás a la izquierda del tee y mantendrás la mano izquierda más cerca del extremo del mango mientras que tu mano derecha debe estar más cerca de donde el mango se encuentra con la vara, en dirección al suelo. Si eres zurdo, te pararás a la derecha del tee y mantendrás la mano derecha más cerca del extremo del mango.

Ambas manos deben estar cerca, tocándose ligeramente y un poco superpuestas. Coloca tu mano no dominante en un agarre cómodo cerca del extremo del mango del palo y mantén la yema de tu dedo pulgar presionada firmemente contra el palo.

Prueba tu agarre. Golpea despacio una bola para ver qué tipo de control tienes. Tus manos deben estar cómodas pero seguras. El palo debe hacer contacto con la pelota sin ocasionarte dolor y sin que se te resbale de las manos. Si tus manos o dedos están incómodos o si el palo se te resbala, tendrás que ajustar una o ambas manos hasta que el palo esté adecuadamente en tus manos.

SEGUNDO PASO: Ponerte en posición
La mano dominante que usaste para el agarre también determinará cómo te pararás en el tee. Si eres diestro, te pararás a la izquierda del tee con el pie izquierdo más cerca del green. Si eres zurdo, en cambio, te pararás a la derecha del tee con el pie derecho más cerca del green.

Mantén los pies separados a la distancia de tus hombros, apoya tu peso en el centro y apunta tu swing de una forma más efectiva. Imagina una línea recta que va desde el tee hacia la bandera.

Flexiona las rodillas para alinear el palo. Mientras estés parado en posición, haz que la cabeza del palo toque el suelo justo detrás del tee. No dobles la espalda para colocar el palo, usa las rodillas. Mantén la espalda lo más recta posible, extiende los brazos pero no extiendas del todo los codos y deja que tus caderas empujen ligeramente hacia atrás mientras mantienes el torso hacia delante.

TERCER PASO: Aprender los movimientos
El swing tiene cuatro fases clave:

Backswing o fase inicial del golpe. El driver tiene que ir hacia atrás, para coger impulso, por detrás de la cabeza. Las caderas giran pero no demasiado, solo alrededor de la mitad de la distancia que giren los hombros. El swing debe formar un círculo perfecto de principio a fin.

Downswing o momento en que el palo deja de subir y empieza a bajar, cogiendo velocidad con dirección a la bola. El downswing es el que le da potencia a tu tiro. Las caderas giran ligeramente con los hombros y la rodilla y la cadera izquierda deben girar sobre el pie izquierdo. El lado izquierdo debe enderezarse a medida que el derecho se mueve hacia adelante para golpear la pelota. Este movimiento está indicado para diestros, para jugadores zurdos, seguir estos pasos a la inversa, es decir, con el lado derecho.

Hay que asegurarse de mover la bola con todo el cuerpo, no solo con los brazos y manos. Esto maximizará la potencia del swing cuando el palo haga contacto con la bola.

Follow through o instante posterior al golpeo de la bola en el que los brazos aún siguen en movimiento.

Finish o fase final del golpeo. El cuerpo no puede dar más ángulo de giro y se termina el movimiento con el palo por encima de la cabeza, con ambas manos al nivel del hombro o por debajo de él.

Una buena terminación del movimiento ayuda a reducir las posibilidades de que la bola se salga del campo una vez que la saques del tee.

Imagen de Buengolpe Medios
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